Igualdad de género: ¿será el siglo de la justicia?
Waldo Mendiluza *
Pese a cumbres, foros y compromisos realizados en las últimas décadas, las mujeres en el planeta continúan discriminadas y sin las mismas oportunidades que los hombres, un escenario que Naciones Unidas espera revertir en un plazo no muy lejano.
Vivimos en un planeta donde la discriminación contra las féminas de todas las edades es galopante, y en algunos casos empeora cada vez más, señaló el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, en un mensaje por el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer.
Para el alto funcionario, no se puede pensar en el desarrollo sostenible mientras persistan las actuales inequidades.
"Sabemos que la igualdad de género significa el progreso para todos; los países con mayor equidad son los que más crecen, las compañías con mayor presencia femenina triunfan, los acuerdo de paz son más exitosos si incluyen a las mujeres y ellas hacen que los parlamentos pueden abarcar más temas sociales, como la salud, la educación y el apoyo a la infancia", advirtió.
Datos de Naciones Unidas reflejan que el 70 por ciento de los mil 200 millones de seres humanos en la pobreza extrema son mujeres, quienes además representan seis de cada 10 de las personas con hambre, un flagelo que azota a 840 millones de habitantes del planeta.
Las estadísticas respaldan la frase "la pobreza tiene rostro femenino", válida sobre todo para muchas de las residentes en África subsahariana, el sudeste asiático, América Latina y el Caribe, donde se concentra el fenómeno.
Voluntad política
Solo la voluntad política podrá hacer del siglo XXI el de la justicia, la cual debe llegar más temprano que tarde, afirmó la secretaria general adjunta de Naciones Unidas y directora ejecutiva de ONU-Mujer, Phumzile Mlambo-Ngcuka.
La exvicepresidenta sudafricana precisó a Prensa Latina, en un encuentro con periodistas, que ese compromiso debe expresarse en leyes, políticas y otras acciones prácticas encaminadas a cambiar el panorama existente.
Se trata de que "los líderes mundiales demuestren que están del lado correcto", con decisiones encaminadas a resolver cuanto antes esos problemas, para los cuales hay respuestas efectivas, dijo.
De acuerdo con Mlambo-Ngcuka, entre los pasos inmediatos está incluir la igualdad de género y el empoderamiento de la mujer entre las prioridades de la agenda de desarrollo sostenible post-2015, que sustituirá a los objetivos del milenio fijados hace 14 años.
Ese proceso representa una oportunidad de realizar avances concretos para cambiar lo antes posible el escenario de inequidad sufrido por las féminas, manifestó.
El apoyo de ellos
Apenas unas horas antes del Día Internacional de la Mujer, la ONU activó la campaña El por Ella, una iniciativa para enrolar a los hombres en la búsqueda de un mundo en el cual se respeten a plenitud los derechos de las féminas.
En la ceremonia de lanzamiento, el Secretario General invitó a niños y hombres a unirse a la cruzada, que se promociona con un video en el cual personas conocidas, como Ban, el Premio Nobel de la Paz Desmond Tutu y el actor Antonio Banderas convocan a todos a sumarse a dichos esfuerzos.
"Cuando hombres y mujeres tienen los mismos derechos, las sociedades prosperan", insistió el diplomático sudcoreano.
Por su parte, Mlambo-Ngcuka destacó la importancia de una defensa unánime del empoderamiento femenino y del fin de las desigualdades, la discriminación y la violencia por motivos de género.
"Las mujeres sostienen una mitad del cielo, por eso llamamos hoy a quienes soportan la otra", expuso.
También el presidente de la Asamblea General de Naciones Unidas, John Ashe, abogó por el respaldo a la campaña El por Ella.
En estos momentos, la comunidad internacional trabaja en la nueva agenda de desarrollo, una oportunidad de crear las bases para acabar con la discriminación, sentenció.
¿Más foros serán decisivos?
La Asamblea General acogió el 6 y 7 de marzo un debate de alto nivel sobre la contribución de las mujeres, los jóvenes y la sociedad civil al desarrollo sostenible, foro que contó con paneles dedicados a la reducción de las desigualdades y la pobreza, y a las estrategias para potenciar el aporte de esos sectores al progreso global en armonía con la naturaleza.
Durante el evento, bloques regionales de países del Sur defendieron la inclusión social en la agenda post-2015, en particular cuestiones como el fin de las inequidades y la violencia de género, el empoderamiento de las mujeres y mayores oportunidades para los jóvenes.
Suriname intervino en el debate a nombre de la Comunidad del Caribe (Caricom), Costa Rica en su rol de presidente pro témpore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y Bolivia en representación del Grupo de los 77 más China, el cual encabeza en 2014.
Al inaugurar el encuentro, Ashe llamó a la búsqueda de acciones que lleven a la igualdad, la inclusión y la participación, en un mundo de notables disparidades en los ingresos, el nivel de vida, el acceso a los recursos naturales, la educación, la salud y el empleo decente.
Debemos cambiar tal desbalance, con frecuencia ligado a la discriminación por motivos de género, edad, religión, discapacidad y origen étnico, expresó el diplomático de Antigua y Barbuda, quien instó a hacer realidad la Declaración y el Plan de Acción de la Conferencia de Beijing sobre la Mujer, de 1995.
El debate de alto nivel es el segundo de los seis previstos por la plenaria de los 193 miembros de la ONU, en su 68 período de sesiones, con el propósito de aportar criterios e ideas para la elaboración de la agenda post-2015.
También en marzo, Naciones Unidas acoge la 58 Sesión de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (CSW, por sus siglas en inglés), señalada hasta el 21 de marzo.
Ese órgano del Consejo Económico Social fue establecido en 1946 para promover la igualdad de género.
Cuba también reclama compromiso
Solo la voluntad política puede cambiar el actual escenario mundial, marcado por las desigualdades y su particular impacto en mujeres y niñas, la experiencia cubana demuestra cuánto puede avanzarse a partir del compromiso gubernamental, declaró a Prensa Latina la diputada Surina Acosta.
La parlamentaria e integrante del Secretariado Nacional de la Federación de Mujeres Cubanas representa a la isla en el 58 Período de Sesiones de la CSW.
En las primeras jornadas del foro instalado el 10 de marzo, advirtió que no basta con establecer derechos a través de instrumentos internacionales, ni aprobar leyes, si no existe al interior de cada uno de los Estados una real voluntad política para hacerlos realidad.
Acosta recordó que más de mil millones de personas viven en la extrema pobreza, mientras la mitad de la riqueza está en manos de apenas el uno por ciento de los habitantes del planeta.
"Las más desfavorecidas o principales víctimas son las mujeres y las niñas. La pobreza tiene un rostro por lo general femenino. Es por eso que consideramos que es insuficiente lo alcanzado en materia de desarrollo e igualdad", afirmó.
Según la diputada, la CSW tiene el reto de seguir luchando por la igualdad de género y por colocar el tema de la equidad entre las prioridades de la comunidad internacional en la agenda post-2015. De acuerdo con Acosta, la isla caribeña comparte sus experiencias en el foro, que la llevaron a cumplir objetivos del milenio mucho antes de adoptarlos.
Hablamos de la participación de las mujeres en los diferentes aspectos de la sociedad y de su pleno acceso a la salud, la educación, y los derechos sexuales y reproductivos, entre otros logros, solo posibles con el triunfo de la Revolución de 1959 y el compromiso gubernamental durante todos estos años, subrayó.
La dirigente femenina resaltó que casi la mitad de los escaños parlamentarios en Cuba son ocupados por mujeres, quienes además encabezan el 38 por ciento de los ministerios y constituyen el 48 por ciento de la fuerza laboral en el sector estatal civil.
Se trata de indicadores muy por encima de la media internacional, que también materializan lo plasmado en el Plan de Acción de la Conferencia de Beijing sobre la Mujer, de 1995, expuso.
* Prensa Latina de Naciones Unidas para Diálogos del Sur