Cannabrava | Candidato a la reelección ha cometido 32 crímenes y sigue impune
Elección presidencial: Es hora del pueblo juzgar el gobierno de Bolsonaro y los militares por sus crímenes Vamos a hacer de esa elección un Tribunal Popular y mandar los militares de vuelta a los cuarteles por el voto.
¿Cómo funciona la comunicación del sistema que controla al gobierno? Gobierno de los militares, gobierno de ocupación al servicio de Estados Unidos. Es preciso sacar a los militares del gobierno para proclamar la verdadera independencia. El gobierno y los medios están al servicio de una colonización de Brasil por los Estados Unidos.
El gobierno pauta la media y la media pauta la media, todos en consonancia con el pensamiento único impuesto por la dictadura del capital financiero.
En realidad, a grandes rasgos, hay una autoridad mayor que está a pautar la media de países bajo la hegemonía del dólar. Basta dar una mirada en las informaciones sobre la guerra en Ucrania: es como si se saliesen de una única redacción.
En lo particular funciona como arma en las guerras internas por narrativas. Ahora parece haber una disonancia entre gobierno y media, pero es sólo en la superficie. En el fondo son ambos protagonistas de un mismo sistema.
Ese juego del gobierno que pauta la media y la media pauta la media es peligroso y aún más en las circunstancias electorales, porque está pautando también las campañas, incluso de la oposición. Son muy astutos. Una buena parte de los militares que ocupan el gobierno son especialistas en inteligencia y guerra cibernética. Desde que asumieron el poder se han especializado en la táctica de diversionismo.
¿Cómo funciona? Bolsonaro distrae, los medios solo hablan sobre eso, y el gobierno vende el petróleo, los aeropuertos, el agua y en poco tiempo, el aire que respiramos, y todo parece como si fuera la cosa más natural del mundo. No lo es. Y el pueblo, en la más extrema miseria.
Tomemos el ejemplo de las declaraciones de la primera dama de la República, afirmando que el Palacio era habitado por demonios y ahora por Jesús. Lula ha respondido en la misma línea, lo que simplemente refuerza lo dicho anteriormente.
Aún más sobre Michelle Bolsonaro. El Frente Interreligioso D. Paulo Evaristo Arns, organización ecuménica, con múltiples denominaciones religiosas, hizo un largo análisis sobre lo dicho y llegó a la conclusión que la señora Bolsonaro cometió nada menos que tres crímenes:
Hirió el Estado Democrático de Derecho
Violó la legislación electoral
Promovió la cultura del odio, lo que pone en riesgo la convivencia entre personas e hiere la Constitución en su artículo 5º e incisos.
Si ha cometido todas esas ilegalidades ¿por qué no fue procesada?
Al no ser advertida por la Justicia Electoral, al no ser abierto un proceso, ella y todos los fieles de su iglesia se sentirán libres para seguir practicando ilegalidades, ilegalidades que cometen en los templos todos los días, haciendo proselitismo contra el candidato de la oposición.
Otro ejemplo. Los militares que ocupan el gobierno reciben dos veces de una misma fuente (Tesoro Nacional) y muy por encima del techo reglamentar que es de 39 mil reales. Meten en el bolsillo más de 100 mil reales mensuales, algunos millones al año. Crimen de apropiación indebida de bien público, prevaricación, corrupción, una afronta en un país en que el sueldo promedio está en torno de dos mil reales.

Senado Federal - Flickr
El primer paso es sacar a los criminales de las esferas del poder, eso lo hacemos el 2 de octubre
Acto burocrático transformado en acto político
La posesión del ministro Alexandre Moraes como presidente del Tribunal Superior Electoral (TSE) se transformó en un gran acto político. Hecho inédito, nunca hubo eso. Importante porque significó un apoyo a la legitimidad del proceso electoral. Y el supremo ministro señaló que va ser duro en el control del proceso electoral.
Hay que ver. El proceso político-electoral está fuera de control hace tiempo. Basta prestar atención en el comportamiento de ciertos empresarios y de gran parte de los templos evangélicos.
Cómo olvidar que han sido esos mismos jueces supremos que promovieron la derrocada de la presidenta Dilma Rousseff en 2016, han mantenido Lula indebidamente preso para que no concurriera a las elecciones presidenciales de 2018.
El gobierno está fraguado de ilegalidad. Gobierno militar, gobierno asesino que tiene en Bolsonaro un agente de diversión. Los supremos jueces son cómplices de esos crímenes.
He recibido de mis amigos del grupo Generación del 68, una relación de esos crímenes; voy apropiarme del trabajo, autorizado, claro está.
32 crímenes cometidos por el gobierno asesino de los militares
Crímenes señalados en el informe final de la Comisión parlamentario de Investigación (CPI) de la Covid:
Epidemia con resultado de muertes
Atraso en la compra de vacunas y no haber adoptado el uso de medidas preventivas, como máscaras y distanciamiento social.
Charlatanismo
Anunciar cura. Que el uso de cloroquina, al iniciarse los síntomas, podría promover 100% de cura. Cloroquina fabricada en los laboratorios del Ejército, lo que implica también en prevaricación.
Incitación al crimen
Incitó a las personas a infringir la determinación del poder público destinada a impedir la propagación de enfermedad contagiosa, estimulando a la población a aglomerarse, a no usar máscara y a no vacunarse.
Falsificación de documento particular
Falsificó estudio del Tribunal de Cuentas de la Unión (TCU) para afirmar que mitad de las muertes por Covid-19 en 2020 habría ocurrido por otras enfermedades. El tribunal ha negado que el documento haya sido elaborado por sus servidores.
Gasto irregular de verbas públicas
Aplicación del dinero diversa de la establecida por ley, como:
Orden para aumentar la producción de cloroquina por el Laboratorio del Ejército al costo de R$ 1,14 millón. Compra de medicamentos para tratamiento precoz (cloroquina, hidroxicloroquina, ivermectina y azitromicina) en el valor de R$ 2.449.454 en 2019
El valor saltó para R$ 41.070.499 en 2020.
Prevaricación
Tenía conocimiento del colapso del sistema de salud en Amazonas, pero no ha tomado las providencias en tiempo. No ha instaurado de inmediato la investigación sobre la denuncia de los hermanos Miranda sobre la corrupción en la compra de la vacuna Covaxin.
Crímenes contra la humanidad
- Crisis de oxígeno medicinal a pacientes ingresados en Amazonas.
Protocolo clínico con medicamento sin eficacia para tratamiento precoz en Manaus.
- Caso de la Prevent Senior - tratamiento con medicamentos sin eficacia en tratamiento de la Covid, “de manera institucional”, sin autorización del organismo oficial de evaluación de protocolos de pesquisa.
- Actos y omisiones contra los indígenas que configuran acciones de exterminio que han resultado en el número de contaminaciones y muertes proporcionalmente superior al de las poblaciones urbanas.
Crimen de responsabilidad debido a la "violación de derecho social”
En situación de grave pandemia, actuó en sentido contrario, mostrándose descomprometido con efectivo combate de la pandemia.
Crimen de responsabilidad debido a la incompatibilidad con dignidad, honor y decoro del cargo
Disminuir la gravedad de la Covid-19, crear mecanismos ineficaces de control y tratamiento de la enfermedad, defender protocolo de tratamiento precoz sin el aval de las autoridades sanitarias, falta de campañas educativas y atraso en la adquisición de vacunas han sido algunas de las conductas que atentaron contra la salud pública y la probidad administrativa.
Crímenes que constan de los más de 100 pedidos de impeachment:
Crimen de fomentar conflicto con otras naciones;
Crimen de hostilidad contra nación extranjera;
Crimen por declaraciones xenofóbicas contra médicos de Cuba;
Crimen de amenaza al Congreso y Superior Tribunal Federal (STF), e interferencia en la Policía Federal (PF);
Crimen por declaraciones y participación en manifestaciones antidemocráticas;
Crimen de amenaza contra representante de la nación para coaccionarlo;
Crimen contra el libre ejercicio del Poder Judicial;
Crimen de constreñir juez del Supremo;
Crimen contra el libre ejercicio de los derechos políticos, individuales y sociales;
Crimen de usar autoridades bajo su subordinación inmediata para practicar abuso del poder (cambios en los mandos de la Fuerzas Armadas e interferencia en la Policía Federal);
Crimen de subvertir o intentar subvertir el orden política y social;
Crimen de incitar militares a la desobediencia a la ley o infracción a la disciplina;
Crimen de provocar animosidad en las clases armadas e incitar motín de policías;
Crimen de violar derechos sociales asegurados en la Constitución (omisiones y errores en el combate a la pandemia);
Crimen contra la seguridad interna del país (omisiones y errores en el combate a la pandemia);
Crimen de decretar o estado de sitio al no haber conmoción interna grave;
Crimen de permitir infracción de ley federal del orden público (promover revuelta contra el aislamiento social en la pandemia);
Crimen contra la probidad en la administración (gestión de la pandemia y ataques ao proceso electoral);
Crimen de expedir órdenes de forma contraria a la Constitución (cambios en el Fuerzas Armadas);
Crimen de proceder de modo incompatible con el decoro del cargo (mentiras para obtener ventaja política);
Crimen de apología a la tortura;
Negligencia a la conservación del patrimonio nacional (gestión financiera en el pandemia, atrasos en la atención a las demandas de estados y municipios en la crisis sanitaria y apoyo a la devastación ambiental;
Crimen contra el cumplimiento de las decisiones judiciales. Acto: no haber creado un plan de protección a indígenas en la pandemia.
Es una larga lista de crímenes impunes. Si la Justicia del Estado no funciona, habrá que ser el pueblo el que hará Justicia. El primer paso es sacar a los criminales de las esferas del poder. Eso se hace el 2 de octubre compareciendo en los puestos de votación y votar en Lula, el único capaz de devolver soberanía e independencia a la nación.
Paulo Cannabrava Filho, periodista latinoamericano editor da revista virtual multimedia Diálogos do Sul
Tradução Beatriz Cannabrava
Las opiniones expresadas en este artículo no reflejan necesariamente la opinión de Diálogos del Sur