Frente evangélica declara apoyo a Lula y alerta para 'trampas bolsonaristas
La gente viene alertando desde el golpe contra Dilma que necesitamos tener una estrategia para lidiar con los evangélicos", afirma Nilza Valeria.
El Frente de Evangélicos por el Estado de Derecho - que actúa en 20 Estados de Brasil - formalizó el jueves (18) apoyo a la candidatura de Luiz Inácio Lula da Silva (PT) en la carrera por el Palacio de la Meseta. El movimiento evangélico es partidista, pero dice que el apoyo es necesario ante "las amenazas de las fuerzas reaccionarias sostenidas por el gobierno federal y por el propio Bolsonaro".
La entidad afirma que el Estado de Derecho (como la democracia) existe "para detener las fuerzas destructoras del Anti-Messias". "Si no detenemos esta situación de manera inmediata, muchas más vidas serán arrebatadas. Y todo el futuro, no solo de Brasil, sino de todo el planeta, estará amenazado", dice el frente.
El crecimiento de Jair Bolsonaro en las encuestas de intención de voto entre el electorado evangélico ha sido señalado por las encuestas. En el último estudio Genial/ Quaest, publicado el miércoles (18), el presidente creció de 48% a 52% en el segmento. Mientras que Lula osciló hacia abajo, del 29% al 28%. En el Datafolha de finales de julio, ese dato ya aparecía con fuerza: la diferencia a favor del actual mandatario pasó de 5 para 10 puntos porcentuales en un mes. Datafolha divulga nueva investigación al final de la tarde.
Es importante observar, sin embargo, que el segmento evangélico, por sí solo, no dará la victoria a Bolsonaro. Eso es porque tendría que crecer entre las mujeres, los más pobres, los jóvenes, los nordestinos y otros grupos - incluso los católicos. Por lo tanto, crecer solo entre evangélicos no es suficiente para Bolsonaro. Aun así, en ese frente es necesario que el combate electoral sea eficiente, porque el crecimiento entre los protestantes se esparce para las mujeres de ese grupo, así como para los más pobres, etc.

Frente de Evangélicos por el Estado de Derecho
Frente evangélica declara apoyo a Lula y alerta para 'trampas bolsonaristas
El caso Damares
"El crecimiento de Bolsonaro en las iglesias es real y ha preocupado a los sectores progresistas", dice Nilza Valeria, coordinadora nacional del Frente de Evangélicos por el Estado de Derecho. Destaca las acciones de la ex ministra Damares Alves y un pastor de la iglesia evangélica Asamblea de Dios en Botucatu (SP), Rúben Oliveira Lima, quien afirmó durante un culto que los creyentes que declaran voto en Lula no merecen la Santa Cena. "Sistema que predica que va a ayudar a los pobres, pero en su matrimonio no tenía un pobre", dijo el pastor.
Valeria distingue dos personajes de los cultos evangélicos. Una cosa son los poderosos líderes mediáticos políticos, que difunden información falsa, noticias falsas y mentiras que se difunden en las redes. Ese trabajo es consciente y deliberadamente insidioso. Damares, por ejemplo, no surgió de la nada antes de ser ministra. Desde 2015 era asesora parlamentaria del senador Magno Malta, líder importante de la bancada evangélica.
Es a partir de pastores "de arriba", como Damares, que las informaciones llegan a los cultos. Los pequeños pastores de comunidades, por ejemplo, muchas veces creen en las informaciones que transmiten a los fieles, que llegan a ellos por la predicación de los poderosos e influyentes.
Es necesario que los creyentes hablen con los creyentes
Para Nilza Valeria, es importante que candidatos progresistas y, principalmente, la campaña de Lula, escuchen las voces progresistas de los evangélicos. "Es necesario de alguna manera incluirnos en la estrategia de campaña, para permitir que creyentes hablen con creyentes", dice. "Lo que no se puede de ninguna manera es emular un discurso en el que Lula y sus aliados hagan discursos religiosos cayendo en la trampa bolsonarista", defiende.
Lo que Bolsonaro hace es crear un discurso de guerra religiosa. Él sabe que ésta es una nación esencialmente cristiana, evangélica o no, y que tiene un segmento religioso creciente en el país, el evangélico. Él usa el discurso moral dirigido a este enorme electorado y sus aliados, como Damares y pastores líderes, hacen el discurso religioso en las redes sociales y hacia el interior de los templos.
En ese escenario, es necesario evitar trampas que den a Bolsonaro la oportunidad de pautar las campañas progresistas. Y, por lo tanto, saber qué decir a los evangélicos. Sobre todo, no discriminarlos como una población aparte. Son personas comunes que toman Autobuses, pagan alquiler, van al supermercado, tienen las mismas carencias de todos, y no pueden ser tratadas como una clase aparte de la sociedad.
"Nadie es solo evangélico. Yo, por ejemplo, estoy superfeliz de que mi Fluminense haya pasado a la semifinal de la Copa de Brasil", dice Valeria. "No solo soy evangélica, también soy tricolor", advierte. "La gente viene alertando desde el golpe contra Dilma que la necesitamos tener una estrategia para lidiar con los evangélicos."
El ejemplo de Macron
Ella da un ejemplo de fuera de Brasil. El presidente francés, Emmanuel Macron, fue reelegido en abril, derrotando a la representante de la extrema derecha Marine Le Pen con apoyo de amplia alianza. "Imaginemos que la esposa del presidente, Brigitte Macron, hubiera publicado un tuit celebrando una película musulmana. Para mí es cierto que Macron no sería reelegido si ella publicara algo que sonara como elogio a la cultura islámica, a cualquier aspecto del mundo islámico", dice Valeria, en referencia a la xenofobia de parte de los franceses.
Eduardo Maretti | Rede Brasil Atual
Tradución: João Baptista Pimentel Neto
Las opiniones expresadas en este artículo no reflejan necesariamente la opinión de Diálogos del Sur